La asociación
cultural Bente d´Abiento denuncia la utilización del patrimonio aragonés para
presentar una visión deformada de la historia de España.
EL MUSEO DE LAS
COLECCIONES REALES
Según
informó el diario El País el 11 de abril de 2016[1], ya
está casi finalizada la obra del edificio que albergará el Museo de las
Colecciones Reales de Madrid, que se encuentra entre el Palacio Real y la
catedral de La Almudena. Este museo fue proyectado durante la presidencia de D.
Manuel Azaña en 1936 y se retomó durante el gobierno de José María Aznar
(1996-2004). En 2017, se inaugurará, con un claro objetivo, en palabras del
presidente de Patrimonio Nacional, Alfredo Pérez Armiñán, al diario El País: “Interpretar la unidad nacional y del legado
histórico de la Monarquía.”
Por
eso, albergará 700 obras de todo tipo (pinturas, armas, tapices, documentos…),
que Patrimonio Nacional tiene repartidas entre sus 19 palacios. Según recoge
Patrimonio Nacional en su web,[2] la
construcción de este edificio nos habrá costado nada menos que 171,5 millones
de euros.
Tal
como indica la misma web, las obras pertenecientes a los reinos medievales
(Aragón, Castilla, León, Navarra…) se presentarán como un “breve preámbulo”,
donde destacará la Casa de Trastámara. A partir de ahí, estará todo dedicado a
las casas de Austria y Borbón. Como vemos, para sostener el falso relato de una
España unida en la Edad Media no se repara en gastos.
Castilla
y Aragón no se unieron políticamente ni siquiera con la boda de los Reyes
Católicos, en 1469. Granada fue incorporada por conquista en 1492 al reino de
Castilla, exactamente igual que Navarra en 1512. A pesar de que los reyes de la
Casa de Austria reinaban en toda la Península Ibérica (en Portugal solo desde
1580 a 1598), la unidad no fue efectiva ni tan siquiera durante la guerra contra
Napoleón (1808-1814). Por eso, utilizar piezas históricas en un museo para sostener
ese mito es una clara manipulación política de la historia.
POLÉMICAS
Además
de su elevado coste y del discurso parcial y politizado que va a suponer este
museo, una dura polémica existe entre Patrimonio Nacional y el Museo del Prado,
ya que se tiene la intención de trasladar obras emblemáticas como “El Jardín de las Delicias” del Bosco,
al nuevo museo.
También
se han recibido quejas de los municipios donde existen museos pertenecientes a
Patrimonio Nacional (Aranjuez, El Escorial, Segovia…) y que temen porque
algunas de sus mejores obras sean trasladadas a este nuevo museo.
EXPOLIO DEL
PATRIMONIO ARAGONÉS
Donde
no se ha escuchado ninguna crítica es en Aragón, siendo que tenemos serias
razones para pensar que obras importantes de nuestro patrimonio histórico y
artístico formarán parte de ese museo y serán descontextualizadas en muchos
casos, en beneficio del mito de la unidad nacional.
Son
conocidos los casos de obras aragonesas que están fuera de Aragón, como los
famosos bienes religiosos de las comarcas orientales aragonesas, que se
encuentran en el Museo Diocesano de Lleida. También sabemos de la portada de
San Miguel de Uncastillo, que se encuentra en un museo de Boston. Sin embargo,
conociendo las obras que van a integrar el Museo de las Colecciones Reales, nos
interesan aquí las obras que están en poder de Patrimonio Nacional.
En
2014, se donó a la Biblioteca Nacional de Madrid el manuscrito más antiguo
hasta la fecha del Vidal Mayor (1247), que contiene los fueros de Aragón en
lengua aragonesa. Este es solo un ejemplo de todo el patrimonio aragonés que
está en poder del estado español y que no va a regresar a nuestro país. Se
calcula que más de 8.000 bienes culturales de Aragón se encuentran en museos
españoles, fuera de Aragón. Entre esos museos están el Real Monasterio de San
Lorenzo del Escorial, el Museo Nacional del Prado, el Museo Arqueológico
Nacional, el Museo Lázaro Galdiano… todos ellos en la Comunidad de Madrid.
Entre
ese patrimonio histórico aragonés “emigrado”
a Madrid, hay que destacar la biblioteca que perteneció al historiador aragonés
Jerónimo Zurita (1512-1580).
LA BIBLIOTECA DE
ZURITA
Según
relata Don Marcelino Menéndez y Pelayo (1856-1912), en 1571, el historiador
aragonés Jerónimo Zurita donó a la Cartuja de Aula Dei de Zaragoza, casi toda
su extensa biblioteca. Se trataba de una colección de gran interés, que Zurita
fue reuniendo a lo largo de toda su vida. En ella había códices griegos,
latinos y otros en lenguas modernas, todos ellos de gran belleza y calidad. En
1626, se celebraron Cortes en Barbastro y Calatayud, a las que asistió Don
Gaspar de Guzmán (el todopoderoso Conde Duque de Olivares), valido del rey
Felipe IV de Castilla (III en Aragón). En su estancia en tierras aragonesas, se
apropió de todos los libros de esa biblioteca. Esos manuscritos permanecieron
en Palacio hasta que el Marqués de Liche los donó, en 1654, al Real Monasterio
de San Lorenzo del Escorial.
Según
informa Juan Ángel Paz Peralta en Los
escudos de armas del Reino de Aragón, uno de los libros que formaba parte
de la colección de Zurita es la Nobilia
Dignatatum, que contiene unos 300 emblemas militares del Bajo Imperio
Romano, en los que se basará después la heráldica europea. En todo el mundo,
solo se conservan 22 copias manuscritas, casi todas incompletas. El ejemplar
aragonés, al ser llevado a Madrid, se integró en el Codex Matritensis, por lo que se conserva intacto en la Biblioteca
Nacional.
RECLAMACIÓN DE
LA ASOCIACIÓN CULTURAL BENTE D´ABIENTO
Por
todo esto, desde nuestra asociación denunciamos que:
-
En
una época en que el gobierno español estrangula a las comunidades autónomas
(especialmente a Aragón) con el argumento del déficit, se destina la obscena cantidad
de 171,5 millones de euros a un museo donde albergar obras que ya están
expuestas en otros lugares.
-
El
estado español insiste en reforzar un falso relato sobre la historia de la
Península Ibérica, pretendiendo imponer la idea de que España es el estado más
antiguo de Europa y que, a lo largo de la Edad Media, los diferentes estados
cristianos peninsulares buscaron siempre la unidad política de toda la
Península. Reclamamos que no se politice la historia y se enseñe y estudie
correctamente.
-
Junto
a este falso relato histórico, el estado español busca reforzar la imagen de la
monarquía y concretamente de la historia de la Casa de Borbón, no admitiendo
otro tipo de argumentación o debate acerca de este tema.
-
En
los museos, palacios y bibliotecas que el estado español gestiona fuera de
Aragón, se encuentran obras históricas, artísticas y de gran interés documental
para comprender e interpretar correctamente la historia de Aragón. Lejos de
buscar su regreso a nuestro país, las va a descontextualizar para construir ese
falso relato político centralista. Reclamamos que el estado haga inventario de
todas estas obras y las circunstancias en que salieron de Aragón. Reclamamos
también el regreso de todo este patrimonio expoliado por el estado español.
-
El
Gobierno de Aragón, las Cortes de Aragón, el Justicia de Aragón y las diversas
instituciones de nuestro país callan ante la utilización que el estado español
hace de nuestro patrimonio. Reclamamos que el mismo empeño que se utiliza para pedir
el legítimo regreso de los bienes religiosos a su tierra, se emplee desde las
instituciones aragonesas para exigir el retorno de todos los bienes que el
estado español custodia.
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