Por la mañana, Nacho Martínez, de Tremol, organizó un taller para niños, en el que les enseñó a hacer una gaita con un guante, como iniciación al mundo de la gaita de boto.
En esta ocasión contamos homenajeamos a Mario Gros, amigo nuestro y maestro de gaita de boto en la Escuela Municipal de Música y Danza. Como no podía ser de otra manera, el presentador fue su gran amigo de la infancia, Eugenio Gracia, que siempre ha colaborado con nosotros y sin cuya ayuda, nunca hubiésemos sacado adelante las trobadas de gaita de boto.
Como ya es tradicional, la Banda de Gaitas de Boto Aragonesas abrió la Trobada con una interpretación de varias piezas.
A continuación, se entregaron los premios del II Concurso de Relatos en torno a la Gaita de Boto Aragonesa. En esta ocasión, los premiados fueron Carlos Abuin por el mejor relato en aragonés y Cristina Cifuentes por el mejor relato en castellano. El premio para el mejor relato en catalán quedó desierto.
La tarde fue una sucesión de homenajes al maestro Mario, por parte de todos los que han compartido con él la vida en sus diferentes facetas: investigador, constructor, maestro, músico... Pedro Mir, Martín Blecua, Luis Miguel Bajén, Rafael García Hermoso, Nacho Martínez.... todos quisieron participar en el homenaje a Mario, así como la Asociación de Gaiteros de Aragón, asociación que Mario ayudó a fundar. Fue muy emotiva la actuación de la orquesta de Rafael García Hermoso con niños y muy divertida la semblanza que Nacho Martínez hizo de su amigo Mario.
Es de destacar la actuación del Dance de Robres y el vídeo en el que recordamos a Simeón Sarrate, cantando al son de la gaita de Mario Gros. También fue emocionante la actuación de una selección de alumnos y ex alumnos de Mario, que fue especialmente emotiva para él y le hizo recordar momentos con cada uno de ellos.
Nosotros quisimos mostrar como asociación, lo que Mario nos ha aportado. De esa manera, algunos gaiteros de nuestra sección musical, Bucardo Folk Aragonés, actuaron junto al polifacético Chabier Aparicio ("Chabieraas").
Por fin llegaba el momento de la entrega de un detalle a Mario que le hiciese recordar este homenaje. Mario subió al escenario y repasó sus recuerdos con cada uno de los que participaron en la tarde. Para rematar, actuó junto al grupo que fundó con aquellos que más quiere, su mujer y sus dos hijos, La Marca de Ifigenia.
La tarde fue emotiva y muy festiva. El numeroso público disfrutó con todas las actuaciones. Ya empezamos a preparar la siguiente.
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